El extinto jefe de Estado, Hugo Chávez, no pudo ser más explícito. Desde la tumba, sigue contrariando a Hermán Escarrá y a sus adláteres como Didalco Bolívar, quienes han asomado la posibilidad de que Maduro disuelva la Asamblea Nacional vía Consejo de Ministros, convocando a nuevas elecciones legislativas. Sin embargo, esta idea echaría por tierra las sacrosantas palabras del líder histórico, quien afirmó que dar semejante voltereta equivaldría a un “golpe de Estado”. Lo cual nada de extraño tendría proveniendo de un grupo de militares y políticos que desde 1992 viene actuando dentro de las filas del golpismo y contra la Constitución y las leyes de la República.
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