“Ahora estoy en confinamiento solitario en una celda de 7 x 10 pies (2 x 3 metros) que no tiene más de una cama, un inodoro y una pequeña repisa para mi escaso cambio de ropa. No tengo permitido escribir, y el único libre que me dejan tener es la Biblia. Ni siquiera tengo una lámpara o una vela cuando oscurece. Si bien todo esto ha sido muy duro para mi familia, ellos entienden que las grandes causas requieren grandes sacrificios”.
Son parte de las palabras que el líder de Voluntad Popular, Leopoldo López, escribió para el The New York Times, en un artículo titulado Aún en prisión, voy a luchar por una Venezuela Libre. En el texto, López, sentenciado a 13 años y nueve meses de prisión, destacó que la jueza Susana Barreiros se comportó como una marioneta del régimen.
Indicó además que Venezuela perdió su democracia y pidió ayuda a la comunidad internacional. Recalcó que hay que ejercer “presión” sobre el gobierno para que permita la presencia de observadores de la OEA y de la Unión Europea en las elecciones del 6 de diciembre.
“No podemos hacer esto solos. Les agradezco sinceramente a todos aquellos alrededor del mundo que nos han defendido. Ese apoyo nos da fe, pero esos esfuerzos no pueden terminarse hoy. Necesitamos que la comunidad internacional pugne por nuestros derechos democráticos”, remató.
Nota de prensa