“En el 2010 no hubo un delito pero sí hubo una imputación hacia mí. Mi ignorancia hizo que me colocara al frente de una empresa que no conocía”, aseveró este jueves el pastor Javier Bertucci, precandidato presidencial.
Estas declaraciones fueron en respuesta a los cuestionamientos que se han hecho en su contra sobre la supuesta relación de su nombre con los Panama Papers, una investigación realizada por periodistas que reveló los nombres de personalidades de distintos países supuestamente vinculadas a paraísos fiscales.
“Cualquiera que quiera investigar y no ser un repetidor de campaña sucia puede ver que no hay ninguna vinculación de mi nombre en el resultado de estas investigaciones Panama Papers. Definitivamente quedé deslindado y no tendrá ninguna afectación en mi campaña”, dijo.
Aseguró que al ver la necesidad de liderazgo que existe en Venezuela, decidió dejar la fundación que tiene y su tarea religiosa para dedicarse a la política. “Se le debe dar el derecho a un porcentaje, que debe rondar por el 50%, de la población que sí quiere ir a votar, y no puede cercenársele ese derecho”, indicó durante entrevista para el Circuito Onda.
Bertucci enfatizó que nada le impide liderar un país con mayoría de ciudadanos católicos, y que tampoco hay razón suficiente para estar divididos entre venezolanos. “En uno de los recorridos que hice hace aproximadamente cinco meses en Anzoátegui, repartíamos comida y una madre tuvo la forma de romper mi alma en ese momento, se me abalanzó y me dijo: ´no aguantamos más, queremos un líder como tú´. Eso me marcó. Vengo a sumar valores a la política”, manifestó.
La oferta electoral del pastor incluye atacar la delincuencia, con una corrección en los valores; activar el aparato productor y levantar el control cambiario para corregir la hiperinflación; fomentar la educación sexual para disminuir las cifras de embarazo precoz; solicitar ayuda humanitaria para solventar el problema de la comida y los medicamentos.
Finalmente indicó que no tiene linea partidistas, lo que le permite escoger a “los mejores” para llevar una gestión ministerial. “Estoy listo para gobernar con los mejores sin importar su partido”, sentenció.