El maltrato es uno de los mayores problemas que enfrenta la sociedad pues puede surgir en cualquier ámbito, la escuela, el trabajo, la calle, el hogar o con la pareja.
Los golpes o lesiones, son los indicios más claros de que una persona está bajo el control de un maltratador; sin embargo, hay otros tipos de violencia que no dejan huellas tan visibles y que incluso pueden causar más daños que las agresiones físicas.
Una persona que sufre violencia, sin importar el tipo que sea, sufre baja autoestima, estrés, ansiedad, depresión, adicción a sustancias nocivas o puede tener tendencias suicidas.
Para prevenir esto, es importante saber reconocer a un maltratador para evitarlo a toda costa, pero ¿cómo identificarlo?
Todo maltratador psicológico se caracteriza por 12 conductas, las cuales te decimos a continuación:
Son intolerantes
Las personas intolerantes no respetan las actitudes, comportamientos o comentarios de los demás; están llenos de prejuicios y cuando algo no les parece, actúan de forma agresiva y resentida, además de que suelen ser sexistas.
Se muestran encantadores al comienzo
Al inicio de una relación, son las personas más encantadoras que puedes imaginar, pero conforme pasa el tiempo y la confianza aumenta, dejan salir su verdadero carácter.
Son autoritarios
Son amantes del orden pero con base en su criterio personal. Se caracterizan por ser antidemocráticos e intransigentes y si alguien no los obedece, estallan en cólera.
Deben sentir que son superiores a los demás y que todos están bajo su control. Esto se debe a su inseguridad y tienen miedo de que la gente note eso, por ello se vuelven controladores.
Tienen pensamiento dicotómico
Consideran que una cosa está bien o mal, nunca hay un término medio. Son rígidos de pensamiento y siempre consideran que ellos tienen la razón.
Son chantajistas
Su comportamiento depende de sus intereses y para conseguir algo, suelen culpabilizar, incomodar o causar miedo a su víctima.
Generalmente hacen que la otra persona se sienta culpable por cosas que no ha hecho o hizo pero sin que estén mal.
Critican todo y no soportan las críticas
Constantemente buscan los defectos de los demás y los utilizan para dañarlos, o incluso inventan una debilidad para hacer que la persona se sienta mal.
Al momento de recibir críticas, sólo hay una verdad: la suya, y si alguien se atreve a criticar alguna mala acción, suele escudarse en los demás o hacer que otros paguen sus errores.
Tienen cambios de humor radicales
Pasan de un estado agradable, al enfado o ira en cuestión de segundos.
Estos cambios pueden deberse a las hipersensibilidad que tienen, lo que hace que se ofendan con facilidad.
Aíslan a la víctima
Hacen que la persona se aleje de su familia y amigos.
La idea es que la víctima se sienta amenazada y tenga miedo de hablar con los demás para que sólo esté con el maltratador.
No se arrepienten
No importan lo que hagan o la gravedad, nunca se sentirán culpables por sus acciones. Siempre tienen justificación de sus actos.
No cumplen sus promesas
Tienden a hacer falsas promesas. Saben pedir perdón de una forma convincente cuando realmente no tiene remordimientos.
Su promesa es que van a cambiar y aunque un tiempo parezca que sí lo hace, en breve volverá a las mismas actitudes. Son expertos en la mentira.
No importa dónde estén
Tratan mal a su pareja sin importar si están en la calle o algún lugar con muchas personas, y para ello utilizan diversas técnicas que los demás no notan.
Actúan como víctimas
Adoptan el papel de víctima para justificar sus acciones y siempre recurren al chantaje.
Por ejemplo, dicen frases como “no me quieres, porque prefieres estar con tus amigas que conmigo”, “yo que te doy todo y así me pagas”, etc.
Si tu pareja o alguien cercano a ti tiene estos comportamientos, lo mejor es alejarte lo más pronto posible. Permanecer con un maltratador, puede dañar tu salud física y emocional, e incluso poner tu vida en riesgo.
No creas que una persona puede cambiar si lo ayudas. Recuerda que este tipo de personas no cambian, sólo modifican sus técnicas para maltratar y controlar a los demás.
