Debes grabarte ese nombre porque lo escucharás y -muy seguramente- repetirás mucho en los próximos meses.
La temporada de premios está a la vuelta de la esquina, lo que se traduce en la época del año en la que Hollywood se convierte en el salón de fiestas más grande y glamoroso del mundo. Todo comenzará el próximo domingo 8 de enero, cuando las estrellas del cine y la televisión, las más grandes y adineradas caras del espectáculo, se paseen por la alfombra roja de los Globos de Oro, dejando su larga y brillante estela hasta el gran cierre, el Oscar, a entregarse el 26 de febrero.
Una de las caras más esperadas -y solicitadas- será Emma Stone, quien protagoniza junto a Ryan Gosling el musical La La Land, favorito en todas las categorías habidas y por haber.
Pero… ¿Por qué estamos tan seguros de eso?
Aquí te lo explicamos.
Emma Stone ya estuvo nominada al Oscar como mejor actriz de reparto en 2015 por Birdman, lo que ya la hace una fuerte candidata para posicionarse como uno de los nombres a relucir este año. Ya está nominada al Globo de Oro, a los Critic’s Choice Awards y los SAG Awards (Lo que nos hace predecir que estará entre las nominadas al Oscar).
La actriz de 28 años de edad está aprovechando en grande el favoritismo de su película para su propio beneficio. En los últimos dos meses, Emma ha asistido a 44 fiestas, premiers y galas. En todas ellas, la estadounidense ha aprovechado las cámaras y los micrófonos para venderse como la gran favorita, la actriz del año, el rostro que debemos admirar y aplaudir.
La gente de Vogue la invitó a ser la portada de la edición de octubre, pero ella -y su equipo de publicistas- pidieron que fuese la de noviembre, fecha más cercana a la temporada de premios y dedicada a las elecciones, un número al que todos iban a prestar su atención.
Desde ya se rumora que las principales casas de moda europeas, se están peleando por vestirla. Dior, Channel, Lanvin, Gucci ya le han enviado sus propuestas, al igual que Tom Ford, Oscar De La Renta y Carolina Herrera.
Emma está confirmada como invitada en los principales Late Night Show de la televisión durante enero y febrero…
¿Descanso? No… Cuando se tiene un Oscar a la vista no se vale descansar.
