Las condiciones de los centros de salud de Venezuela han motivado a los doctores a irse del país, mientras que algunos recurren a los familiares que tienen en el exterior para pedirle ayuda con los tratamientos médicos.
Una encuesta realizada por la organización Médicos por la Salud reveló que los equipos de rayos X están dañados en 51% de los centros asistenciales del país, mientras que 95% de los tomógrafos están inoperativos.
La escasez de medicamentos e insumos médicos también ha sido una limitante para el sector salud, que además ha experimentado una fuga de personal debido a la falta de condiciones y los bajos sueldos que reciben por su labor.
La falla del suministro de medicinas ha obligado a muchos venezolanos a pedirle a familiares en el extranjero que envíen los insumos necesarios para poder culminar sus tratamientos.
Por otro lado, la falta de servicios básicos en los centros de salud ha empeorado la situación: la organización Médicos por la Salud detalló que 70% de los hospitales estuvieron sin agua y 60% sin luz en varias oportunidades durante 2018.
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