Mientras una mujer soldado, del Batallón de Infantería 121 Socuavó-Machiques, limpiaba su arma de reglamento se le escapó una ráfaga. Quedó herida de bala en la pierna derecha. Los proyectiles alcanzaron a cinco de sus compañeros.
Más de 30 veces disparó Carolina Palmar. Compañeros de tropa de la recluta desconocen las causas que originaron que perdiera el control del fúsil y se le accionara.
Los heridos fueron: Luis Fernández González (19), con heridas en el intercostal, en el brazo y en el fémur derecho; José Antonio paredes de 18 años con proyectil en el brazo izquierdo y tres soldados más con roce de bala.
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